NO ESTARÁN SOLOS

La Unión Deportiva Las Palmas afronta la nueva temporada haciendo una fuerte apuesta por jugadores que se han forjado en su cantera. Es un riesgo, pero hay que asumirlo con coraje y valentía. La crisis económica, que se ensaña con todos los equipos modestos españoles, obliga a los dirigentes amarillos a tomar el camino correcto: el del control absoluto del gasto. La UD aún debe 21 millones a una entidad bancaria tras salir del proceso concursal y no está para alegrías financieras que vuelva a poner en peligro su propia existencia.

     Vivimos años de austeridad. La UD solo puede fichar a coste cero y rentabilizar al máximo la venta de sus jugadores. Pensando en la próxima temporada 2011-2012, en que se ha fijado la permanencia como objetivo prioritario, se han fichado a jugadores que van a ocupar puestos que la cantera no ha podido garantizar. Es decir, se ha confiado en nuestros jóvenes tal como hiciera el club cuando lo presidía Juan Trujillo Febles a principio de los años sesenta. Y fueron precisamente aquellos “diablillos amarillos” los que dieron años después la mayor satisfacción a la  afición canaria en la historia de la UD: un subcampeonato y un tercer puesto practicando un juego que emocionó a toda España.

    Pero esta etapa no fue fruto de un milagro, sino de un trabajo paciente y comprensivo en donde la afición jugó también un papel fundamental. En las imágenes de aquellos años vemos al añorado Estadio Insular con un lleno hasta la bandera; el llamado eufemísticamente “jugador número 12” era realmente el que empujaba al equipo a metas deportivas como las que se vivieron en una década prodigiosa.

     Volvemos a vivir ahora un periodo ilusionante en donde la UD Las Palmas necesita del apoyo y la comprensión de los aficionados. Para que vuelva a estar entre los grandes de la Liga de las Estrellas los jóvenes canteranos canarios necesitan verse arropados en el Estadio de Gran Canaria. Si lo han conseguido equipos como el Rayo Vallecano (a pesar de su grave crisis, donde sus jugadores ni cobraban) o el Granada después de 35 años, la UD también puede soñar con ese objetivo.

     Y ese apoyo tiene que hacerse realidad en la actual campaña de abonados. Los jugadores, equipo técnico y dirigentes amarillos necesitan saber que no están solos en este proyecto, que tienen detrás de esta arriesgada apuesta por la joven cantera a una afición que, como gritan cada semana los seguidores del Liverpool, nunca caminará sola. El escritor argentino Walter Saavedra inicia su conocido Poema del fútbol con estos dos versos: “Como vas a saber lo que es el amor/si nunca te hiciste hincha de un club”. La UD necesita, ahora más que nunca, de ese amor de los que se sienten amarillos y reafirmar con toda convicción que el futuro es nuestro.